El sol no es la única amenaza para la piel. Uno de los principales problemas del mundo actual es la contaminación ambiental producida por diversos gases y material particulado que puede no solo afectar la salud de las personas, generando enfermedades, sino también produciendo efectos nocivos sobre nuestra piel, penetrando directamente a través de la barrera cutánea. Estas sustancias causan procesos inflamatorios en la piel y en múltiples órganos, provocando reducción de los antioxidantes naturales (vitamina E y C, entre otras); además de empeorar y acelerar el envejecimiento cutáneo, que puede ser agravado con la radiación solar y el calentamiento global.La polución ambiental es uno de los peores enemigos de la piel, por eso además de cuidarla con
antioxidantes, realizar una limpieza neutra y protegerla del sol con un buen
protector solar; es momento de que todos tomemos conciencia del calentamiento global y la contaminación ambiental, porque, a pesar de haber una mayor conciencia social y política sobre esta problemática, todavía estamos lejos de disminuir el daño generado.